Al Panteón no le
Importa si Abriste 8 Empresas.
Tampoco si eres
Director de Ingeniería con Doctorado en Harvard en Cinturón Black Belt. Eso
satisface nuestro ego, pero no todas las dimensiones humanas con que contamos.
Dime, ¿te parece
tétrica la foto? Si es así, qué bueno. En el pasado se creía que revistiendo a
un finado con todas las joyas y artículos de lujo, éstos le servirían en el más
allá. La realidad es que no nos llevamos nada, ni siquiera nuestro cuerpo
físico que se queda en este plano.
Y no es que no
esté bien el dejar de superarse. Eso es muy bueno siempre y cuando no
desbalancees tu vida, ya que todas las dimensiones deben de estar cubiertas si
es que quieres una vida lo más feliz posible:
1.- Salud. Todo
el dinero del mundo no te garantiza la mínima salud si no te cuidas.
2.- Amor. Todo
el dinero del mundo no te garantiza que te amen por lo que eres.
3.- Propósito.
Si lo que haces actualmente no está alineado con lo que te gusta, puedes hacer
mucho dinero, pero no te sentirás tú mismo. Se supone que nacimos para hacer
una diferencia positiva en éste mundo, ¿lo estamos logrando?
4.- Sentido social.
Si no tienes amigos verdaderos, el dinero no compensa la soledad, tampoco si no
contribuyes al bienestar de la comunidad.
5.- Espiritualidad.
Si no te sientes que eres parte del universo eterno y que estás en armonía con
él, el vació se apoderará de ti.
6.- Tiempo
libre. Si no tienes tiempo para desarrollar tu “niño interior”, créeme eres un solamente
esclavo bien pagado con corbata, títulos colgados en la pared, o autoesclavo
masoquista. Cada trabajo tiene su nivel de esclavitud asociado. Eres pobre si a
pesar de tener millones de dólares, no puedes despegarte al menos un mes de
cada año para viajar o hacer cosas que te gustan.
El dinero es necesario
y deseable para tener una vida plena, pero en aras de ir a buscarlo como si
fuéramos poseídos, muchísimas veces dejamos de lado las otras dimensiones de la
felicidad. Y el dinero no las compra. Así como con amor no se puede pagar la
cuenta del hospital cuando nos fracturamos un pie, no se puede pagar con dinero
el amor auténtico de una persona. Si el dinero es bien usado para mejorar la
vida de la familia y sociedad, es excelente ir en busca de él. Simplemente recuerda
no desbalancear tu vida.
Los políticos
son ejemplo de desbalanceo de un ser humano. Ellos muchas veces sacrifican la
moral, su familia, sus valores, la sociedad de la cual abusan con su poder y se
llenan de riquezas materiales. La realidad es que no por tener 40 carros de
colección en la cochera pueden manejar más de uno a la vez. No por tener 800
pares de zapatos se pueden usar más de un par a la vez. Pueden tener 25 casas,
pero solo vivir en una sola a la vez. No por tener mucho dinero van a ser
inmortales. Ellos pueden comer todos los manjares, pero solo 3 veces al día. Es
decir, el dinero nos satisface, pero el límite es igual en todos los humanos,
políticos o no políticos.
Si vas a abrir
una empresa nueva o pasar 2 horas extras más diarias en la oficina para lograr
la promoción que buscas, pregúntate qué estás sacrificando. Si lo que estás
sacrificando es de manera temporal, vas a tener satisfacciones mayores en el
mediano y largo plazo, muy bien, hazlo. Pero si estás sacrificando a tu
familia, tus valores, tu salud, o tu niño interior, el daño que te haces es
irreversible.
Derechos Reservados 2019, Ing. Gerardo Herrero Morales
https://mx.linkedin.com/in/gerardoherrero